Tuesday, July 31, 2012

Polaroid

Se persiguieron por toda la habitación. Cansados ya por las cosquillas, se miraron cada uno en su extremo de la almohada.

-¿Me odiarás mañana?
-Posiblemente, pero con placentero odio.
-Bien, pero no me odiarás tanto como yo a vos.

Dicho esto, se durmieron otra vez.

Monday, July 30, 2012

No todo fue naufragar...

-Algo haremos, amor.

Con cierta violencia, derivada de la desesperación, me miró de frente. En sus ojos se reflejaba la angustia de las películas que no pudimos ver juntos.

-¿Cómo qué? - más que pregunta, pareció una súplica por la esperanza perdida.

- No lo sé... - Conocí entonces que no tengo todas las respuestas, que quizá nunca he tenido ninguna.

Saturday, July 21, 2012

2/22

Cuando el último sorbo gira en el vaso, cuando la última bocanada resbala de su lengua, él se pregunta: ¿Dónde están los malditos silencios que valen la pena?

Sunday, July 08, 2012

Una tarde cualquiera

-Decíme si es cierto el rumor que me llegó anoche: Que escondés el tabaco detrás del espejo y ahora comés gomitas de alquitrán.


Contáme, si tienen razón los que dicen que ahora vestís a la moda inglesa, y que ya no soñás con detener los relojes.


Sólo curiosidad -siempre fui un tipo curioso, lo sabés- ¿Es verdad que ya no gustás de los cuentos sobre tierras olvidadas y fantasmas que recorren los caminos de barro, que ahora preferís las tremendas historias del pop psicodélico?


Del otro lado del parque, la chica de azul -que caminaba de frente hacia él- parecía descifrar sus pensamientos; porque cuando estuvo lo suficientemente cerca, de una bofetada lo mandó al carajo.

Tuesday, July 03, 2012

Giros III


-Te lo juro. Hay años en los que se alinean la luna, venus, el sol y alguna estrella de la Argentina.

Encendí un cigarro en el patio de mi casa, para pensar tranquilamente sobre los misterios que pueden esconder las lechugas en la noche...

Sunday, July 01, 2012

Giros II


Así dormirá el sueño eterno, plácido y cálidamente-frío-de-los-difuntos. Mientras tanto, los perros sin dueño, al acecho de un hogar, buscarán el hueso sin piel para saciar la nostalgia.

En el centro del cielo, nacerá la estrella y finalmente –“por fin”, celebrarán los erudictos de las vocales- el mundo detendrá el suspiro para sonreír de placer.

Del otro lado de la calle, brincarán tres pequeñas ranas y su algarabía trascenderá las fronteras, y en medio de la lluvia del sur, tendremos el permiso –amor- de viajar sin tener que mostrar nuestros pasaportes.

Giros I


-¿Saben una cosa? -Preguntó Gustavo antes de lanzarse al abismo- Estoy harto de escuchar el himno de los iracundos en mi cabeza.

Esa noche brindamos por su ausencia, y su bienestar.