He perdido la cordura. Estoy seguro que la tenía en mi bolsillo y seguro cuando saqué las llaves se debió caer... No la encuentro, no está en mi caja de cartón con la ropa, no está debajo de mi cama, no está en mi maletín... No encuentro dónde dejé mi cordura, creo que la perdí.
Es cierto ya estaba muy desgastada, con algunos remiendos, pero aún así funcionaba. Me protegía. El último ataque tuyo casi hace que se rompa por completo, por eso la tenía en el bolsillo para llevarla a reparar. Pero no la encuentro!!! Se ha perdido mi cordura, si alguien la encuentra tirada por favor avíseme:
C. Del Valle
Apartamento 79, color gris,
Avenida de las Esperanzas hambrientas,
La ciudad muerta.
El Paìs de las Sombras.
4 comments:
Lamentablemente la encontré. Me la encuentro todos los días. Pasea con zapatos, corbatas y maletines. Está clonada. La veo a veces incluso peleando con mi sombra, mientras tomo una ducha o miro a solas por la ventana. Entonces ahí también la veo, parece que te está buscando, y va en esos rostros con camisetas de niño bueno, universitario, chancletas y las llaves de un mercedes en la mano. La taza de café en la otra, de donde también chupa la cordura. Aparece en los silencios y en las manos frías. En los ojos que miran hacia abajo. Ahí la tienes, la cordura. ¿De verdad te sirve para algo?
Saludos de un bilbaína que encontró tu blog viviendo al otro lado del océano.
Es bueno saber que alguien la encontró... de lo que no estoy seguro es si realmente la quiero recuperar. Tengo miedo de volver a caminar por ahí "racionalmente", talvez es mejor olvidarme de las cosas que se hacen con cordura y aprender a vivir sin ella.
Tenés razón:
Creo que no la necesito, gracias.
Nos vemos bilbaína,
C. Del Valle
che maestro no te hagas drama, a veces las cosas son mas bellas cuando les agregas un poco de tu locura, la cordura a veces estorba, muy bueno, muy bueno...
¿y quien está cuerdo por estos días?, buen cuento.
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